Netflix lanza este cruce entre Hijos de los hombres, Náufrago y Buried, otro thriller del «subgénero solitario» con una factura técnica soberbia, pulso narrativo y un trabajo extraordinario de su protagonista, Anna Castillo. Los mimbres para la viralidad están ahí, pero la película tiene un problema: el contexto distópico inicial solo sirve de excusa, cuando es otra película más interesante que desaparece a los pocos minutos sin retornar jamás. La película parece confiar en ese catalizador para dar rienda suelta a su verdadera trama, cuando ambos deberían justificarse mutuamente. Lo mejor: dura mucho menos que la batería de ciertos teléfonos.
Suspense